
Como el día anterior, no hubo que esperar mucho para que llegase el primer gol. Peque, en una combinación con Mayte e Irene Córdoba, batió a la meta polaca con un tiro raso. Un tanto que era el reflejo de la intensidad con la que salió España, consciente de que Polonia era un rival al que no había que dejarse crecer en el partido.
Con esa actitud, las de Clàudia Pons dominaron y apenas concedieron ocasiones en su área. El partido se acabó de romper a los ocho minutos. Laura Córdoba, en dos acciones casi consecutivas, elevaba a distancia al 0-3. Primero aprovechaba el rechace de un remate al palo de Antía y después finalizaba una contra tras robar ella misma el balón. Sólo 10 segundos de juego pasaron de una jugada a otra.
Polonia trató de reaccionar usando el juego de cinco. Logró tener más el balón, pero sin llegar a inquietar la meta de Elena, segura cuando tuvo que intervenir. Como broche a esos primeros minutos llegó el 0-4, obra de Antía en una falta directa al borde del área.
En la segunda parte bajó la intensidad. España no pasó apuros y manejó el choque, creando ocasiones para que el marcador fuera más elevado, aunque el quinto no llegó hasta que faltaban cuatro minutos, con un disparo de Ale de Paz casi sin ángulo. Mayte, con un tiro al palo, e Irene Córdoba, con un lanzamiento de 10 metros, pudieron hacer más grande la ventaja, pero el objetivo estaba logrado. Victoria y al Mundial.